Es un hombre oriundo de la ciudad de Pereira, quien trabajaba con normalidad, hasta que, a sus 36 años empieza a desarrollar una enfermedad en su cuerpo, que le hace perder la capacidad laboral, presentando fuertes dolores e incluso, dejándolo por un largo tiempo en silla de ruedas, y donde la empresa en la que estaba empleado, le negó la pensión por invalidez. ALJ conoce su caso y a través de un gran estudio y proceso del caso, se le reconoce a Víctor la pensión por invalidez, mejorando así sus condiciones y dignidad de vida.